Estas cifras, que no dejar de ser espectaculares, irán a más en próximas temporadas gracias al papel que desempeñará la nueva construcción que otorga a nuestro puerto capacidad para atender hasta diez mil cruceristas en operativa puerto base.
El futuro edificio tiene una superficie de 8.400 metros cuadrados e integra las funciones de chequeo, control, espera de pasajeros, distribución de maletas y locales, además de áreas de aparcamiento para guaguas, taxis y zona de logística y aprovisionamiento.
Su construcción fue adjudicada en marzo de 2015 a la Unión Temporal de Empresas (UTE) integrada por Acciona Infraestructuras S.A. y Constructora de Proyectos y Obra Civil 2012. Con un plazo récord de ejecución de catorce meses, junto con los trabajos de urbanización y la adquisición de los “finger” ha supuesto una inversión de diez millones de euros.
El original y sobre todo práctico diseño es resultado de las consultas realizadas durante más de un año entre los principales armadores, quienes dejaron patentes sus recomendaciones no sólo en lo que a operativa de este tipo de terminales se refiere sino también en gabinetes expertos en dicha materia. Es por ello que la Autoridad Portuaria provincial eligió al estudio Berenblum Busch Architecture (BBA), afincado en Miami, para las labores de consultoría de esta importante ejecución cuya construcción fue adjudicad
Proceso constructivo
Para la construcción de la estación de cruceros se aprovechó parte de la infraestructura de los tinglados ubicados en el Muelle de Ribera que acogían los movimientos vinculados a exportación frutera e importación de papel. Con una superficie de aproximadamente seis mil metros cuadrados fueron renovados y ampliados, pasando a formar parte del complejo arquitectónico.
La terminal de cruceros se alza en el Muelle de Ribera, al lado del Edificio Puerto-Ciudad, desarrollándose doscientos metros longitudinalmente y quedando configurada por la disposición tres núcleos singulares que se disponen en los extremos y zona central. El puente de pasajeros se sitúa en el lado mar y recorre el edificio de norte a sur.
Dada la singularidad formal de los tres núcleos destacados, estos debieron construirse en madera contralaminada, un sistema constructivo prefabricado, ecológico y flexible, sumamente adaptable a la complejidad volumétrica que además aporta un alto nivel de aislamiento térmico y acústico.
Alta eficiencia energética
La terminal de cruceros de Santa Cruz de Tenerife constituye un buen ejemplo de edificio de alta eficiencia energética. El equipo técnico de Anaga Consultores S.L.P encargado de la redacción del proyecto unió conocimiento y tecnología para alcanzar la máxima calificación energética, clase A, para el edificio.
Esto se traduce en una reducción de las emisiones de CO2 por encima del 60% respecto al edificio de referencia, calificación energética D.
La mejora de la eficiencia energética, evitará la emisión a la atmósfera de más de 560 toneladas de CO2 cada año. En términos económicos, el ahorro en la factura de electricidad supera los 100.000 € anuales.
Edificio accesible
Puertos de Tenerife ha trabajado conjuntamente con la Sociedad Insular para la Promoción de las Personas con Discapacidad, Sinpromi S.L. para la consecución de un edificio accesible, sensible con los discapacitados. En este sentido, destaca la prestación, en los mostradores de checking, del servicio de bucles magnéticos para usuarios de prótesis auditivas, lo que permitirá a las personas con dichos problemas oír con mayor claridad.
Fuente: CanaryPorts
http://www.canaryports.es/texto-diario/mostrar/499836/puerto-santa-cruz-tenerife-estrena-nueva-estacion-cruceros
