La sociedad de clasificación DNV ha introducido la nueva notación de clase ABATE, diseñada para ayudar a los propietarios y operadores de instalaciones flotantes en alta mar a identificar y aplicar medidas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI). Altera Infrastructure es el primer propietario de FPSO que ha puesto a prueba la notación de DNV en el FPSO Petrojarl Knarr, con resultados satisfactorios hasta el momento

La Organización Marítima Internacional (OMI) está fijando objetivos claros y ambiciosos para la descarbonización del sector marítimo. Hasta ahora, las instalaciones en alta mar no están sujetas a requisitos internacionales similares. Pero a medida que aumenta la presión de las partes interesadas, el sector está deseando investigar cómo puede mejorar la sostenibilidad de sus instalaciones. Con el lanzamiento de su notación ABATE, DNV está ayudando al sector a dar un paso importante en esta dirección.

La notación ABATE tiene como objetivo ayudar a los propietarios de buques en alta mar a reducir las emisiones de GEI en sus instalaciones mediante la creación de participación y compromiso en este tema, tanto de los propietarios como de sus sistemas de gestión, a través del establecimiento de objetivos claros, evaluando progresos, al tiempo que se pueden ajustar los planes para incorporar las tecnologías futuras“, dijo Geir Fuglerud, Director de Clasificación Offshore en DNV Maritime. “Queremos ofrecer a la industria soluciones prácticas para reducir las emisiones, por lo que ha sido tan útil trabajar con un propietario comprometido y proactivo como Altera en este piloto para identificar áreas de mejora.

La notación ABATE proporciona un enfoque estructurado para identificar y evaluar la aplicación de medidas de reducción, basadas en el diseño y el funcionamiento de las instalaciones individuales, para permitir reducciones medibles de las emisiones de GEI de una instalación. Desarrollada principalmente para cubrir las instalaciones de petróleo y gas en alta mar, los principios generales pueden aplicarse también a otras instalaciones flotantes en alta mar.

Nuestra visión es liderar al sector hacia un futuro sostenible, por lo que ser el primer FPSO del mundo en pilotar la innovadora notación ABATE de DNV es un paso importante para Altera y está en línea con nuestra visión. Reducir las emisiones en una industria tradicional como la nuestra es un reto, pero también muy gratificante, y estoy seguro de que estamos en el camino correcto“, dice Chris Brett, Presidente de Altera Production en Altera Infrastructure.

ABATE es una notación voluntaria y modular, que comprende un aspecto de gestión y una serie de calificadores que abordan diferentes áreas de aplicación de las medidas de reducción. Los calificadores son los siguientes, en función del tipo de instalación:

  • (P): Generación de energía. La generación de energía en las instalaciones en alta mar representa normalmente la mayor fuente de emisiones
  • (F): Quema. Existen medidas para reducir las emisiones, aunque la antorcha debe mantenerse para situaciones de emergencia
  • (Pr): Fugas y ventilación de metano. En los sistemas de procesamiento de hidrocarburos puede ser una fuente importante de emisiones
  • (S): Ventilación de tanques de almacenamiento. Para las instalaciones que almacenan hidrocarburos, la ventilación de los tanques de almacenamiento es una fuente de emisiones
  • (CC): Captura de carbono. La captura de CO2 en los gases de combustión y su posterior eliminación y almacenamiento seguros es un medio para evitar la entrada de GEI en la atmósfera

Fuente: dnv
www.dnv.com/maritime

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