LA VOZ.- La empresa gallega ya tiene destinados a 24 trabajadores en la terminal del país

Había logrado ya otros acuerdos a nivel internacional, pero ninguno de esta envergadura. Tras imponerse a otras compañías en un concurso mundial, Reganosa ha firmado recientemente un contrato para encargarse de la operación y el mantenimiento de una planta de gas en Malta, en el área de Delimara, durante los próximos 18 años.

La sociedad promotora de la regasificadora gallega tiene ya en estos momentos a 24 personas desplazadas al complejo, aunque las previsiones que maneja apuntan a que el pico de empleo podría ascender hasta los 35. La planta de Delimara, que forma parte de la estrategia del país para reducir su dependencia energética de los derivados del petróleo, se encuentra en su fase de arranque. De hecho, el pasado miércoles, día 11, recibió su primer buque, el Galea, el mismo que en diciembre vació su cargamento en Reganosa.

Paulatinamente, y conforme vaya superando las pertinentes fases de pruebas, la regasificadora entrará en operación comercial. Desde la firma del contrato y hasta ahora, el trabajo de la compañía de la ría de Ferrol en las instalaciones se ha centrado en asesorar al promotor de la terminal, Electrogas Malta, en aquellas cuestiones para las que ha sido requerida.

La adjudicación de este contrato -cuyo importe no trascendió- viene a respaldar la estrategia impulsada por la empresa mugardesa, que este año cumple su primera década en funcionamiento, y que hace dos creó su filial Reganosa Servicios, con el fin de dar el salto al exterior. «El contrato es estratégico, después de haber apostado en el 2015 por una diversificación internacional basada en el conocimiento», explica Emilio Bruquetas, director general de la compañía. Recuerda que solo un año después de su creación, Reganosa Servicios «ha participado en proyectos en los cuatro continentes».

Reducir la dependencia

Malta abrió en el 2013 un concurso internacional para el suministro de electricidad y gas natural, para modificar su estrategia energética y disminuir el consumo de hidrocarburos pesados. ElectroGas Malta Limited (EGM) -integrada a partes iguales por la alemana Siemens, la suiza Socar y el consorcio local GEM Holding- ganó esa licitación, que ha implicado la puesta en marcha de una central de ciclo combinado, una planta de regasificación y un buque de almacenamiento de GNL, que presta servicio a la terminal, cuya gestión y mantenimiento ha sido adjudicado ahora a la compañía gallega. La regasificadora maltesa alimentará al grupo de ciclo combinado (de 215 megavatios de potencia) y a otra central eléctrica.

Bruquetas incide en que el modo de operar la planta de Mugardos, «de forma eficiente y segura, es percibida por otros actores del sector que nos buscan para sus proyectos». Además, asegura que el sistema gasista español es de los más desarrollados del mundo, a lo que se suma que «hemos crecido de forma exitosa y tenemos la capacidad para poder competir». Lo hace, además, en toda la cadena del ciclo de vida de las infraestructuras, desde la fase más incipiente de los estudios de viabilidad de las terminales, hasta la operación y el mantenimiento de las plantas, pasando por el desarrollo de los trabajos de ingeniería .

Tras los cambios accionariales materializados el pasado año, Reganosa está participada al 50,69 % por el Grupo Tojeiro; al 24,31 % por la Xunta; al 15 % por el fondo australiano First State y, al 10 %, por la argelina Sonatrach.

Los antecedentes de los proyectos de Francia y Kuwait

Pese a ser la planta de gas más reciente y de menor tamaño de las seis del sistema gasista español, Reganosa se ha caracterizado en los últimos años por situarse a la vanguardia del sector en diferentes momentos. Como cuando lideró, no solo a nivel nacional, sino también europeo, el transporte de gas a través de camiones cisterna, un negocio que aunque secundario, no es nada desdeñable para la compañía mugardesa. En pleno desplome de la demanda energética en España debido a la crisis económica, la firma se lanzó al mercado de la carga de los buques, frente al tradicional de la descarga de gas que había caracterizado las terminales, llegando a situarse en el primer nivel nacional en este mercado.

También se posicionó en la vanguardia del sector, junto a la Xunta, Navantia y la universidad, cuando la Unión Europea lanzó sus directrices medioambientales que obligan a los buques a reducir sus emisiones contaminantes y propician un mayor uso del GNL como combustible marítimo. Así, Reganosa lanzó un proyecto para convertirse en un hub -nudo logístico- en el Atlántico para el suministro de gas a los buques. Posteriormente, se integró en el Core LNGas Hive, con los principales operadores y puertos para seguir avanzando en este objetivo. La firma tiene ya muy avanzada la ingeniería para adaptar su muelle de atraque para poder recibir todo tipo de barcos.

El contrato de operación y mantenimiento de la planta de Malta refrenda la apuesta por la comercialización del conocimiento realizada por la dirección de la compañía, que ya había tenido otros éxitos anteriores. Así, el pasado año, Reganosa participó en la puesta en marcha de la planta de gas de Dunkerque, situada al noroeste de Francia, lo que implicó que durante varios meses un equipo de técnicos de la terminal mugardesa se desplazasen al país. Además, la compañía dirigida por Emilio Bruquetas ha sido nominada por los promotores de la planta de regasificación de Kuwait, una de las mayores dimensiones del mundo, como la ingeniería de supervisión de los aspectos operacionales de la instalación.

Fuente: LA VOZ
http://www.lavozdegalicia.es/noticia/economia/2017/01/13/reganosa-gana-concurso-mundial-operar-planta-gas-malta/0003_201701G13P27992.htm

 

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