«Hay barcos que tienen que dedicar un día o día y medio de trabajo completo para pagar solo los costes de la gasolina. Si a esto sumas las subidas de impuestos y las nuevas normativas europeas sobre las redes, el panorama es desolador. El poder adquisitivo de los pescadores ha descendido en un 50% en los últimos cinco años». Con estas palabras describe el presidente de la Federación Provincial de Cofradías de Pescadores de la provincia, Miguel Ángel Carmona, la situación que atraviesa el sector pesquero malagueño.

cmefoto21a

La flota pesquera malagueña ha pasado de las 354 embarcaciones censadas en 2006 a 274.

SUR, 20 Ene. (Málaga).- Como botón de muestra de este progresivo deterioro, y de que «la mar ya no trae cuentas», como dicen los pescadores, ahí están los 80 barcos que se han ido al desguace en los últimos siete años en Málaga. Así, la flota pesquera malagueña, repartida por los puertos de La Caleta de Vélez, la capital, Fuengirola, Marbella y Estepona, ha pasado de las 354 embarcaciones censadas en 2006 a 274, según datos de la Consejería de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía y de la Federación Provincial de Cofradías de Pescadores. Así, si en 2005 se vendieron en las lonjas malagueñas 13.047 toneladas de pescados, mariscos y moluscos, con un valor de 19 millones, en 2013, la cifra se redujo hasta 11.314 toneladas y 23,6 millones de euros de facturación total.

Los patrones de las cofradías explican que 2013 ha sido el primer año completo en el que los barcos de arrastre y de cerco, los más abundantes en los puertos malagueños, han tenido que modificar, por imposición de la Unión Europea, el grosor de las redes, pasando de tres a cinco milímetros, «lo que daña el pescado», se queja el patrón mayor de la Cofradía de La Caleta de Vélez, José Luis Guerrero, quien asegura que las capturas de este tipo de embarcaciones, de especies como las sardinas, los boquerones, las caballas o los jureles, han descendido en un 40% en el último año.

«Lo hemos intentado todo, hemos pedido ayuda a los partidos, que se han comprometido con nosotros, pero no hemos conseguido todavía nada, los inspectores de la Unión Europea no cambian de opinión», se lamenta el responsable del mayor puerto pesquero de la provincia, con 78 embarcaciones. Sin embargo, a los problemas derivados de las normativas y controles europeos, se suman los que tienen que ver con las propias condiciones del medio en el que los pescadores desarrollan su actividad. Las temidas mareas rojas, un fenómeno natural que afecta a los moluscos y que impide su captura, por estar contaminados temporalmente de una toxina muy peligrosa para el ser humano, así como la necesidad de realizar paradas biológicas para permitir que se recuperen los caladeros, son los dos grandes caballos de batalla a los que se enfrenta el sector pesquero.

Desde que en 2011 se agotaron en Andalucía las ayudas previstas en la Política Pesquera Comunitaria (PPC) para el periodo 2007-2013, no hay ningún tipo de fondos públicos directos para los patrones y marineros que deciden parar su actividad para que se recuperen las especies que capturan. «Estamos pendientes de que la Unión apruebe la nueva regulación y las ayudas para el periodo 2014-2020, sabemos que hay ya un borrador, y que van a apostar más por los paros biológicos de especies y no de tipos de flotas como ocurría hasta ahora», dice Carmona.

En el caso de las mareas rojas, la situación es «desesperante», porque la práctica totalidad de los caladeros malagueños llevan más de un mes cerrados, por la alerta de la inspección pesquera de la Junta. Así, la normativa establece que si se superan los 21 días consecutivos sin faenar, tienen derecho a recibir ayudas, pero estos fondos también se han agotado ya, por lo que los pescadores piden que se amplíen, de los 180 días de ayudas contemplados hasta ahora, a los 400.

Más de 3.000 empleos

Los pescadores malagueños se reunieron este pasado jueves en Sevilla con la directora general de Pesca de la Junta de Andalucía, Margarita Pérez, para tratar este asunto. La consejera del ramo, Elena Víboras, aseguró que entre las posibles soluciones podría estar buscar salidas hacia caladeros más cercanos. Así, esta pasada semana se reabrió el de Estepona.

En el conjunto de la provincia, el sector pesquero, a pesar de la progresiva pérdida de barcos de los últimos años, da empleo directo a unas 600 personas, y genera alrededor de 3.000 puestos indirectos. Uno de los sectores que está teniendo más auge en los últimos años son los criaderos de peces y moluscos en las costas, la llamada acuicultura marina, con instalaciones en Torre del Mar, la capital y Benalmádena.

LAS CIFRAS

274.- Barcos componen la flota pesquera de la provincia, repartida por los puertos de La Caleta (78), Málaga (38), Fuengirola (54), Marbella (42) y Estepona (62).

11.314.- Son los toneladas de pescado, mariscos y moluscos que llegaron a las lonjas malagueñas al cierre del año 2013, 1.733 menos que en 2005.

23,6.- millones de euros generaron las capturas de pescados y mariscos en Málaga, 4,6 millones más que en 2005.

Be Sociable, Share!