El prolongado episodio de toxina del que todavía no ha logrado desprenderse el mar gallego -en las últimas horas han cerrado nuevos polígonos de bateas ante el repunte de la marea roja- tiene contra las cuerdas al sector mejillonero, que firma un 2013 nefasto.

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La patronal conservera considera necesario afinar la norma sobre toxinas

LA VOZ DE GALICIA, 27 Dic. (Vigo).- Pero no solo preocupa a los productores. También la industria transformadora está en vilo. ¿Por qué? La patronal conservera, Anfaco, dice que actualmente envasar mejillón gallego implica «un riesgo empresarial», dado que la industria no tiene el 100 % de garantías sanitarias para ponerlo en el mercado. Y no las tiene, dice Anfaco, porque la normativa sobre toxinas no es la adecuada. Así que pide a la Xunta que intente buscar una solución «ante un problema de gran magnitud». Algo que, por cierto, también exigen con voz desesperada los productores de bivalvo.

Anfaco expuso su postura a la Consellería do Mar en una reunión a la que asistió Rosa Quintana y que coincidió en el tiempo con encuentros que también mantuvieron otros cargos del departamento con los productores y los representantes de los cocederos. En ella, la patronal conservera dejó claro que en las actuales circunstancias es imposible trabajar con mejillón gallego. El problema, según dicen, radica en que la normativa sobre mareas rojas marca que el nivel de toxicidad debe ser el mismo para el mejillón fresco que para el procesado. Y que eso es inviable, puesto que al cocerlo y deshidratarlo ese nivel sube. Así que las conserveras se podrían encontrar con que compraron mejillón procedente de un polígono abierto -es decir, sin toxina-, pero que cuando lo van a envasar sí supera los índices de toxicidad permitidos. De ahí que desde Anfaco indiquen que no tienen «el 100 % de garantías» para trabajar con este producto insignia del mar gallego.

La solución, según la industria, pasa por afinar la normativa y que el nivel de toxicidad permitido para el mejillón fresco no sea idéntico al del procesado, «sino un factor equivalente». Insisten en que lo único que busca la patronal es «el 100 % de garantías sanitarias y cero riesgo empresarial, porque no se puede trabajar en esta situación de incertidumbre total».

Anfaco cree que la Xunta entiende perfectamente el problema y confía en que se pueda buscar algún tipo de solución. Desde la Administración, en todo caso, solo quisieron decir sobre la reunión que fue un encuentro «de trabajo para analizar las perspectivas» del sector.

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