El almirante grancanario Jaime Muñoz-Delgado Díaz del Río fue nombrado ayer jefe del Estado Mayor de la Armada por el Consejo de Ministros. Su designación, que supone el colofón a más de cuarenta años de carrera, se produjo a propuesta del ministro de Defensa, Pedro Morenés, en sustitución del almirante Manuel Rebollo, e implicará también su ascenso a almirante general.
El almirante Jaime Muñoz-Delgado fue elegido ayer por el Consejo de Ministros
Muñoz-Delgado nació en Las Palmas de Gran Canaria hace 60 años y, con sólo 19, ingresó en la Armada, momento desde el que su trayectoria, tanto en mar como en tierra, ha sido imparable. Cinco años más tarde, en 1976, fue promovido a alférez de Navío, y su carrera continuó con el ascenso a teniente de Navío en 1979 y a capitán de Corbeta (1989), de Fragata (1996) y de Navío en noviembre de 2001. En octubre de 2005 fue promovido a contralmirante y, en julio de 2008, a vicealmirante. Además, en enero de este año ascendió al puesto de almirante, desempeñando desde entonces el cargo de jefe de Apoyo Logístico de la Armada.
El almirante general es especialista en Submarinos y Comunicaciones y diplomado en Guerra Naval, curso que realizó en Greenwich (Reino Unido), y que convalidó en la Escuela de Guerra Naval española. Es viudo y tiene seis hijos, de los cuales cuatro son oficiales de la Armada.
Durante toda su trayectoria, ha estado embarcado en varios destinos, entre los que destacan las fragatas Andalucía y Vicente Yáñez Pinzón y los submarinos Marsopa, Tonina, Siroco y Narval. Además, fue segundo comandante del submarino Galerna y de la corbeta Vencedora, donde participó en la Guerra del Golfo, desplegado en el Mar Rojo, entre enero y mayo de 1991. También ha sido comandante del patrullero Bergantín y del submarino Siroco, donde formó parte de la operación Sharp Guard en el mar Adriático (la primera misión de mantenimiento de la paz llevada a cabo por un submarino).
En abril de 2004 fue nombrado jefe de la Flotilla, Base y Escuela de Submarinos, y permaneció en ese destino hasta su ascenso a contralmirante en el año 2005, trabajando como jefe del Órgano Auxiliar de la Jefatura del Apoyo Logístico.
Entre sus destinos en tierra, destacan el estado mayor de la Flotilla de Submarinos, estado mayor del Mando Operativo Naval y jefe de la Sección de Doctrina de la Dirección de Doctrina y Planes de Personal (actual dirección de Personal). Como vicealmirante desempeñó los cargos de director de mantenimiento de la Jefatura del Apoyo Logístico, y almirante jefe del Arsenal de Cartagena.
Además, Muñoz-Delgado cuenta con numerosos reconocimientos, estando en posesión de la Gran Cruz, la Cruz, Encomienda y Placa de San Hermenegildo, la Gran Cruz del Mérito Naval, cinco cruces al Mérito Naval, la Medalla de la Liberación de Kuwait, las Medalla de la OTAN y de la UEO, y la Medalla al Mérito Policial.
