El dique seco de Naval Gijón podría ser utilizado para investigación y evaluación de nuevos buques a construir en los astilleros asturianos
EL COMERCIO, 17 Nov. (Gijón).- HORACIO J. MONTES COTO | COORDINADOR DEL GRUPO DE INVESTIGACIÓN EN EL ÁMBITO MARINO DE LA UNIVERSIDAD DE OVIEDO:El asunto nace del final del apartado ‘D.- Industria’ del punto ‘2.3 Desarrollo de sectores estratégicos’ del programa de Foro Asturias, donde se propone el centro en cuestión. El gobierno municipal de la exalcaldesa Paz Fernández Felgueroso barajó la posibilidad de que los antiguos terrenos de Naval Gijón podrían habilitarse para una ampliación del Parque Científico y Tecnológico de Gijón, que ya está empezando a estar saturado a pesar de los nuevos espacios habilitados en el INTRA.
A mediados del pasado año, desconocía los planes de Foro, pues este partido político no se había creado aún, pero fue entonces cuando reflexioné acerca de que la mejor reutilización de esos terrenos debería hacerse dentro del mismo ámbito en el cual desarrolló su actividad la empresa Naval Gijón y, anteriormente, el Dique de Duro Felguera. Más tarde, en una reunión del Clúster de Energía, Medio Ambiente y Cambio Climático (CEMACC), que tuvo lugar el pasado año, yo planteé que se propugnara ese espacio para asuntos de investigación a desarrollar desde el propio CEMACC y las empresas vinculadas al mismo. Entre otras cosas, esos terrenos podrían acoger un mini museo o aula interpretativa de lo que fue (esperemos que siga siendo) la construcción naval en Gijón y Asturias. Desconozco el grado de desmantelamiento de esas instalaciones, pero, durante su vida activa, dispusieron de equipamientos que hoy y en un futuro podrían ser reutilizados en investigación.
La Universidad de Oviedo, a través del Maritime Field Investigation Group of the University of Oviedo (MaFIG-UniOvi) de la Escuela Superior de Marina Civil y de otros grupos del campus de Gijón, debería ser el motor principal que impulsara esos equipamientos. De hecho, MaFIG-UniOvi, del cual soy su coordinador, dispone de programas informáticos de cálculo y simulación del comportamiento estático y dinámico de distintos tipos de dispositivos flotantes cuando están sometidos a distintos tipos de olas, vientos y corrientes. Este ‘software’ puede ser la herramienta inicial a utilizar para la evaluación de variados dispositivos flotantes y, una vez comprobada su posible viabilidad, pasarían a ser ensayados mediante modelos a escala en tanques de olas o, mejor, en canales de experiencias hidrodinámicas. En España, tan solo tenemos un canal de estas características: el Canal de Experiencias Hidrodinámicas de El Pardo (CEHIPAR), de Madrid, si bien la Escuela Superior de Ingeniería Naval de la Universidad Politécnica de Madrid dispone de otro más pequeño. Recientemente, la Universidad de Oviedo adquirió un pequeño tanque con generador de olas, encaminado a realizar diferentes ensayos vinculados a la futura plataforma experimental que el CEMACC pretende instalar en la costa de Asturias. Digo un pequeño tanque porque en Cantabria tienen un equipamiento de similares características, pero de mayores dimensiones.
