La Comisión Europea ha autorizado la entrada del Gobierno en el accionariado del astillero La Naval de Sestao, siempre que la participación sea minoritaria y temporal. El acuerdo llega cuando los socios de la firma ya han resuelto sus problemas de financiación con unos polémicos avales que aportó la ingeniería Ingeteam a cambio del apoyo del resto de los socios a sus decisiones ligadas a los proyectos en curso y las ampliaciones de capital. La entrada del Gobierno con unos cinco millones de euros puede aportar más solidez y estabilidad al accionariado.

Industria destaca que la decisión está ahora en manos del astillero vizcaíno
 
EL PAIS, 15 May. (Vitoria).- El viceconsejero de Industria, Xabier Garmendia, informó a los socios del astillero de la decisión de Bruselas en la reunión que el Consejo de Administración de la firma celebró el pasado día 4, a la que solo dejó de asistir Knutsen, que tiene el 8,6% de las acciones y 12 barcos construidos en La Naval.
 
El armador noruego, que sigue a la espera de que se solucione la impugnación que planteó sobfre el citado acuerdo en torno a los avales, se encuentra molesto con aquella decisión, que motivó además la dimisión del presidente de la firma, Pedro Morenés, también como consejero de Astilleros de Murueta. Esta última firma controla el 34,36% del capital de La Naval.
 
Morenes y otros directivos controlan otro 12,37% del astillero a través de la firma Iniciativas Navales del Norte. El otro accionista con el 10,31% es Naviera del Nervión.
 
Ahora depende de La Naval la fórmula en que dé entrada al Gobierno, en principio después de que su Consejo de Administración elaborase un plan estratégico. Para financiar ese proyecto se abriría un proceso de ampliación de capital que facilitaría la entrada del Ejecutivo a través de Industria. El instrumento se la operación sería la sociedad de inversiones Socade, en la que también participan las Diputaciones.
 
"El Gobierno cumple sus compromisos", aseguraron ayer fuentes de Industria, que no se atrevieron a precisar si finalmente La Naval aceptará la entrada de la consejería. Aunque todo parece indicar que será un hecho, dichas fuentes se limitaron a apuntar que "la decisión está ahora en La Naval".
 
Mientras, el consejero de Economía, Carlos Aguirre, pidió ayer implicación a las instituciones financieras y a las Sociedades de Garantía Recíproca para incrementar el acceso a la financiación de las empresas. Aguirre clausuró en Vitoria la Junta General de Accionistas de la sociedad de garantía Oinarri y destacó la intensa colaboración del Ejecutivo con este tipo de firmas para reafianzar las operaciones de aval a las empresas y facilitar así sus inversiones en activos fijos.
 
Aguirre reiteró la voluntad del Ejecutivo de seguir avanzando en el esquema de colaboración con las sociedades de garantía y sostuvo que "para que las empresas puedan acceder a financiación resulta imprescindible que las entidades financieras faciliten la concesión de créditos y que las Sociedades de Garantía Recíproca fomenten las operaciones a través de la concesión de avales".
 
Es la segunda vez en tres días que el Gobierno insta al sector financiero a aumentar el flujo de dinero que llega a las empresas y la concesión de créditos a estas, después de que el pasado miércoles lo hiciese el propio lehendakari, Patxi López, aprovechando su discurso en el almuerzo posterior a la asamblea de la patronal vizcaína Cebek.
 
El Ejecutivo ya ha adelantado que va a mantener un programa de apoyo a la financiación de autónomos y empresas, con en el que se facilita el acceso tanto a créditos para la financiación de activos fijos, como para nuevo capital circulante, o para refinanciar o ampliar los plazos del que ya se hubiese concedido anteriormente.
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