La compañía pública de construcción naval Navantia está negociando con el emirato de Qatar la construcción de varios buques de tamaño medio (entre una fragata y una corbeta) del tipo que la empresa está construyendo en la Bahía de Cádiz para Venezuela.
Se trata de una nueva vía comercial que abre Navantia para buscar carga de trabajo y de fructificar serían los astilleros de San Fernando y Puerto Real
BAHIA, 04 May. (Cádiz).- Según apuntaba ayer a Información Bahía, la diputada socialista por Cádiz en el Congreso, Mamen Sánchez, el emir de Qatar esta interesada en adquirir varias unidades y tras una primera reunión, el país árabe ha solicitado a Navantia que le muestre el tipo de barcos que realiza en una reunión posterior a la que está pendiente el ponerle fecha.
Se da la circunstancia que durante la reciente visita del emir de Qatar Hamad bin Khalifa al-Thani a España, representantes de Navantia, entre otras importantes empresas españolas, acudieron como invitados a la cena de gala que le ofreció el Rey Don Juan Carlos en el Palacio Real.
Se trata de una nueva vía comercial que abre Navantia para buscar carga de trabajo y de fructificar serían los astilleros de San Fernando y Puerto Real los más beneficiados porque se construirían allí.
La vía abierta por esta posibilidad de negocio supone un punto de esperanza en el sector industrial gaditano que está en las fases finales de los contratos que Navantia mantiene con Venezuela a través de los Buques de Vigilancia Litoral (BVL) y los Patrulleros Oceánicos de Vigilancia de la Zona Económica Exclusiva (Povzee)
Navantia y la armada
Por otra parte, los ministerios de Defensa e Industria y la empresa Navantia siguen adelante con el proceso administrativo requerido por el Consejo de Ministros para dar luz verde a la segunda fase de los Buques de Acción Marítima según la cual, Defensa debe presentar al Gobierno sus requerimientos específicos en cuanto al tipo de barcos que necesitan y el coste de los mismos para autorizar el proyecto y la firma del contrato.
La fecha para resolver este trámite es el mes de julio por lo que la firma del contrato podría hacerse en agosto o septiembre para empezar a cortar las primeras chapas de los buques en el último trimestre del año.
Por otra parte, y según publica Infodefensa.com, los últimos cinco grandes programas de modernización de la Armada española han supuesto contratos en el exterior por un valor de 4.100 millones de euros y han proporcionado una carga de trabajo a los astilleros de Navantia de 35 millones de horas.
Así, durante un encuentro en el Cuartel General de la Armada se señalaba que es “muy difícil cuantificar los beneficios tecnológicos obtenidos” por los programas del BAC Cantabria, el LHD Juan Carlos I, la F-100, los submarinos S-80 y la primera serie de BAM. Sin embargo, sí son medibles los contratos con el exterior de productos “altamente sofisticados”.
Esto significa que España se ha colocado en primera línea en la construcción naval militar y que “nuestra industria es capaz de competir y ganar midiéndose con otros países de primer orden”, señaló el Almirante Jefe del Estado Mayor de la Armada (Ajema), Manuel Rebollo, durante el encuentro.
