Baleària no se rinde. La naviera alicantina se ha sobrepuesto a la negativa inicial de Capitanía Marítima y, por mediación de Ports, le ha presentado un estudio de maniobrabilidad para instalar dos norays (sujeciones) con los que alargar la línea de atraque del dique y permitir así la llegada del ‘Martín i Soler', un buque hasta
El Govern accede a pagar los dos ‘norays’ (sujeciones) necesarios, cuyo coste asciende a sólo 8.000 euros
ÚLTIMA HORA, 04 May. (Menorca).- El conseller de Obres Públiques, Jaume Carbonero, también ha dejado claro que no interferirá en los planes de la compañía y dará luz verde a lo que acuerde Capitanía Marítima, «que es quien ostenta las competencias y, por tanto, tiene la última palabra sobre el tema». En cualquier caso, Ports está dispuesto a asumir el coste de la obra, estimado en unos 8.000 euros, que «se amortizan en un solo día».
Este es el precio que, según sus propios cálculos, debería pagarse para instalar los dos norays y dar así viabilidad al atraque del ‘Martín i Soler’ en el dique de Son Blanc. De hecho, hace ya dos meses que la compañía vende billetes a través de internet para que los pasajeros puedan viajar a Barcelona a bordo de un ferry más cómodo y con mayor capacidad de carga, que cubrirá la travesía en nueve horas. La fecha para sustituir el actual rápido ‘Ramon Llull’ por el ‘Martín i Soler’, que aún a día de hoy mantiene la naviera, es la del próximo 25 de mayo, dentro de apenas tres semanas.
El dique de Son Blanc, en el que se empezará a operar este mismo mes, fue concebido para dar cabida a buques de hasta 130 metros de eslora por lo que, en caso de aprobarse, la iniciativa de Baleària abriría la puerta a otras compañías para operar también en Ciutadella con barcos más grandes.
Precisamente, Ports ha encargado a la consultora madrileña Prointec un estudio para la instalación de los duques de alba necesarios con los que ampliar la capacidad de atraque del dique. La administración autonómica, no obstante, ha pospuesto la ejecución del proyecto hasta después de la presente temporada turística. El objetivo que persigue el Govern es que buques y cruceros de entre 130 y 250 metros puedan operar en Ciutadella a partir del verano de 2012. Para entonces, anuncia, ya no habrá lugar a iniciativas como la de Baleària, pues todas las compañías, incluida su competidora Trasmediterránea, podrán operar con barcos más grandes en Ciutadella.
