Diez de los tripulantes son ucranios, ocho búlgaros, cinco indios y dos rumanos. Uno de los marineros logró avisar del secuestro a la compañía que gestiona el barco, la británica Zodiac. El Asian Glory es el segundo barco de Zodiac secuestrado en los últimos días por los piratas somalíes, después de que el pasado 28 de diciembre se apoderaran del St. James Park, con 26 marineros abordo. El St. James Park, carguero de 52.000 toneladas que había zarpado de España con rumbo a Tailandia, fue retenido en aguas del golfo de Adén.
Con estos últimos secuestros, a los que se ha venido a sumar en la última semana el buque de bandera panameña Navios Apollon, que navegaba hacia India cargado con fertilizantes, los piratas de la zona mantienen en su poder a más de 10 barcos de distintas nacionalidades.
Somalia ha estado sumida en el caos sin un Gobierno central efectivo desde 1991, mientras aumentan los ataques de bandas piratas que operan en refugios costeros del fallido estado del Cuerno de África. Las bandas han conseguido decenas de millones de dólares de la captura y rescate de barcos en el Golfo de Adén que une Europa y Asia. También se han internado aguas adentro del océano Indico para eludir a buques extranjeros enviados para proteger los cargamentos comerciales.
El Gobierno de Somalia, que cuenta con el respaldo de Occidente, ha prometido luchar contra la piratería, pero las altas sumas establecidas para los rescates están atrayendo más inversionistas tanto dentro como fuera del país. Los analistas señalan que hay pocas esperanzas de detener las lucrativas operaciones a menos que se pueda aplicar orden en el país, alternativa improbable dado que grupos rebeldes controlan gran parte de la nación y los piratas se encuentran bien afianzados.
[Fuente: Reuter y agencias]
Un buque carguero con bandera británica y 25 tripulantes a bordo fue secuestrado la noche del 1 de enero por piratas somalíes a unas 600 millas náuticas (unos 1.100 kilómetros) al este de la costa del país africano. El Asian Glory, un barco de 45.000 toneladas que transportaba automóviles, navegaba desde Singapur a Arabia Saudí y tenía previsto unirse a un convoy que se dirigía al golfo de Adén cuando fue interceptado.
