El presidente del Clúster Marítimo Español, Federico Esteve, y el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, pronunciaron los discursos de apertura y de clausura en la entrega de los premios Miguel Pardo el pasado 1 de diciembre. “El Clúster Marítimo Español” dijo Esteve, “es ya el primer clúster de España en términos de producción y empleo y otorga al sector del mar esa dimensión tan necesaria para emprender grandes proyectos y consorcios”. Ruiz-Gallardón, por su parte, destacó la intensa relación de Madrid con el sector del mar, ya que la ciudad alberga “más de 60 empresas de transporte marítimo, que representan el 12% del total nacional y el 21% de la facturación del sector”.

INTERVENCIÓN DEL PRESIDENTE DEL CME, FEDERICO ESTEVE

Excmas. autoridades, queridos compañeros e invitados, medios de comunicación, amigos todos, muchas gracias de corazón por la asistencia a la Fiesta Anual del CME.

Como Vds. saben, los clústeres son agrupaciones de empresas, grupos de empresas e instituciones interrelacionadas, que trabajan sectorial y geográficamente en actividades estrechamente relacionadas y que pueden cooperar y beneficiarse del aprovechamiento de sinergias y de importantes economías externas. El propósito de un clúster, es fusionar los intereses, los conocimientos, el saber hacer, la cultura empresarial y los estilos de todos sus integrantes para que todos y cada uno ganen productividad, competitividad, y el grupo, presencia sectorial en la economía globalizada.

El CME se constituyó hace ya algo mas de dos años, siguiendo las recomendaciones de la Comisión de las Comunidades Europeas, que en su Libro Azul sobre el Sector Marítimo, propone una política marítima integrada de la Unión Europea, que descanse en el reconocimiento claro, de la interconexión de todo lo relativo a los océanos y mares europeos y en la directriz, de que las políticas relacionadas con el mar, deben formularse conjuntamente, para poder obtener los resultados perseguidos. Como uno de las principales actuaciones para lograr este objetivo la Comisión, en su Comunicado Final del 10.10.2007, recomendaba la creación de una red europea de agrupaciones marítimas (clusters).

El sector marítimo español, es responsable directo de 456.000 empleos y más de un millón inducidos y supone un 7,2% del valor añadido de nuestra economía, si su sumamos efecto directo, indirecto e inducido. Cada euro gastado en el sector genera un efecto multiplicador en la economía española de 3 euros y, en términos de empleo, el efecto multiplicador es de 2,5. El mar se ha convertido en un sector de gran dinamismo y de arrastre de tecnologías e inversiones, comprometido, sin duda, con el nuevo modelo productivo sostenible

El CME integra a cerca de 60 socios, que representan a unas 800 entidades y constituye un punto de encuentro, de un conjunto equilibrado de entidades diversas, del sector Marítimo Español, con una estrategia compartida. Es el mayor clúster industrial de España, tanto en términos de producción como en el número de trabajadores empleados, lo que le otorga esa dimensión tan necesaria para emprender grandes proyectos y también para acceder a la creación de consorcios y de acciones de cooperación, que son la base del Programa Marco Europeo y también de las nuevas líneas del Plan Nacional de I+D+i y del programa del Gobierno Ingenio 2010. En todos ellos subyace la idea de cooperación como principal estrategia, y el Clúster es, sobre todo, cooperación en estado puro. Cooperación, por otra parte, y esto es importante resaltarlo, no para sostener sectores económicamente obsoletos y de otro tiempo, sino cooperación en la innovación y la tecnología, en los sectores más innovadores y en la nueva sociedad del conocimiento en la que estamos inmersos. La presencia hoy de altos responsables de las políticas de investigación, de desarrollo tecnológico y de innovación son un buen indicador de que estamos ante una actividad cargada de futuro y que coexistirá con los sectores de mayor crecimiento, como las telecomunicaciones o la energía.

En el CME hay  un lugar para los astilleros y la construcción naval; para los navieros; para la pesca y la acuicultura; para la investigación oceanográfica; para la Armada y la industria estratégica; para la actividad portuaria; para los transportes y la logística; para los servicios jurídicos, financieros y de muy diversa índole; para las ingenierías; para los centros tecnológicos; para las administraciones públicas, y, para, entre muchos otros, los clústeres regionales representativos de las comunidades autónomas más ligadas al mar, como Galicia, Asturias, País Vasco, Cataluña, Murcia, Baleares o Canarias, que nos han ayudado en toda esta etapa, a vertebrar un gran clúster nacional. Porque el Clúster Marítimo Español es un gran elemento vertebrador no sólo entre los clústeres territoriales, sino también con la red europea de clústeres marítimos y también con sus homólogos latinoamericanos, a los que España está aportando toda su experiencia en este campo.

Deseo aprovechar el acto para presentaros a los Miembros de Honor, que la Asamblea del CME ha decidido, en reunión celebrada esta mañana, incorporar al mismo y a quienes tengo que agradecer muy efusivamente, la deferencia que nos conceden al aceptar el título y poner a disposición del CME su enorme prestigio. La mutua colaboración se plasmará en breve plazo a través de los respectivos convenios de colaboración.

Estamos hablando en primer lugar, de la Armada Española, que hoy nos honra con su presencia, en la persona de su Almirante Jefe del Estado Mayor y otros insignes representantes. Su Historia Gloriosa, debe de enorgullecernos a todos los españoles, porque además, acrisola las máximas virtudes de amor patrio, como aprendí a valorar en mi etapa de Milicia Naval Universitaria en San Fernando y de Prácticas como Alférez de Fragata en El Canal de Experiencias Hidrodinámicas del Pardo, y me motiva a lucir con orgullo la Cruz al Mérito Naval, que en su día me fue concedida. Alcalde Gallardón, aunque en Madrid no hay playa, como dice la canción, es sede de las más importantes empresas marítimas de nuestro pais, entre ellas el citado Canal de Experiencias de la Armada, miembro del CME y considerado entre los dos primeros de Europa, por su alto prestigio tecnológico y de numerosas entidades empresariales, institucionales y de investigación, que tienen en el mar su principal objeto de actuación. En esta misma sala hay una buena representación de muchas de ellas.

El segundo Miembro de Honor, que nos ennoblece con su aceptación, es la Real Academia de la Mar, que Preside con gran acierto el gran emprendedor, ex presidente de todos los empresarios madrileños y uno de los más importantes navieros españoles contemporáneos, como es Fernando Fernandez Tapias. El amor que tiene Fernando a la Mar, solo puede ser equiparable, al que siente por su querido Real Madrid. Estoy convencido, Fernando, que seremos capaces de plasmar en el convenio, una muy fructífera colaboración en aras del mayor prestigio de ambas entidades.   

El tercer y por ahora último Miembro de Honor, que presta generosamente su enorme reputación al CME, para contribuir a potenciar la marina deportiva de nuestro pais, es Theresa Zabell, considerada como la mejor deportista española de todos los tiempos, ganadora de dos Medallas de Oro Olímpicas,  5 Campeonatos Del Mundo y 3 Europeos, Número 1 del ranking mundial de vela y la regatista más laureada del mundo. Theresa malagueña "de corazón" como ella se define, (¡¡¡Que bien la habéis criado y mimado en tu ciudad, Alcalde de Málaga!!!), une a su infinito amor a la cultura  de la mar, donde ha logrado sus innumerables Títulos Vinculados al Deporte, una profunda  preocupación por la conservación de la naturaleza y del medio ambiente marino, como Presidenta de la Fundación ECOMAR.

Gracias a los tres Miembros de Honor, por su aceptación y presencia en este acto, que quiere reconocer la aportación de los premiados, en cada uno de los Ejes Estratégicos, que dirigen la actuación del CME, para el cumplimiento de sus objetivos. Cada Premio, consiste en una creación artística de nuestro compañero Carlos García-Monzón, que ha dado forma física, al modelo ahora replicado en estatuas de bronce y a quien quiero felicitar por su feliz inspiración artística del logotipo del CME y cuyos premios han sido apadrinados por importantes Entidades, como veremos a continuación, en la entrega de los mismos y a quienes deseo agradecer su generoso patrocinio.

Pero, en esta breve presentación del Clúster Marítimo Español, quiero guardar un lugar muy especial para el gran promotor de esta primera “fiesta grande” del sector del mar y también de muchas de las acciones que ahora estamos ejecutando los que fuimos sus compañeros de actividad profesional y también sus amigos. Me estoy refiriendo a Miguel Pardo, anterior presidente del Clúster, con quien me unía una fraternal amistad de 50 años y bajo cuya Presidencia, el CME, experimentó un gran impulso, por lo que en su Memoria, la Asamblea ha decidido que lleven su nombre, como homenaje a su persona. Vaya para Miguel Pardo nuestro recuerdo más cariñoso y nuestro aplauso porque fue un gran presidente y aún un mejor amigo.

Muchas Gracias
 

INTERVENCIÓN DEL ALCALDE DE MADRID, ALBERTO RUIZ-GALLARDÓN

Presidente del Cluster Marítimo Español, Don Federico Esteve Jaquotot; premiados; patrocinadores; señoras y señores:
 

En contra de lo que engañosamente podría sugerir la geografía, no hay ciudad más indicada que Madrid para conceder unos premios que, como estos que acabamos de entregar, pretenden estimular y reconocer el papel que diversas actividades económicas desempeñan dentro del Cluster Marítimo Español, entendido como la conjunción de sectores y sinergias que interactúan en nuestro transporte por mar. La razón fundamental es que la notable complejidad de una economía avanzada como la madrileña, cuya fortaleza ante situaciones de crisis se explica tanto por su capacidad para proyectarse hacia el exterior como por la diversidad de los sectores que la componen, permite comprender muy bien las singularidades y necesidades de quienes impulsan una organización de esta naturaleza. A ese principio de carácter general se suma la circunstancia de que Madrid alberga más de 60 empresas de transporte marítimo que representan el 12% del total nacional, y que concentran el 21% de la facturación de todo el sector en España, lo que convierte a nuestra ciudad en el líder español de esta actividad, muy por encima de Las Palmas de Gran Canaria o Barcelona, que nos siguen en el ranking.
 

En un momento como el actual, cuando se intenta concebir un modelo productivo más seguro y consistente, la experiencia de Madrid ofrece una referencia de primer orden, justo en coincidencia con los planteamientos que definen todo cluster, que no es ni una industria, ni un gremio, ni una organización de consumidores, sino el resultado del diálogo y la cooperación de todos ellos. Así, la propia economía madrileña, que concilia la industria con los servicios, y la garantía pública con la iniciativa privada, ha sabido crear un espacio de oportunidad en el que el esfuerzo combinado de muchos agentes ha creado cadenas de valor complejas y de gran alcance.

La importancia del sector marítimo para nuestra ciudad es expresión de ello, pues no en vano la región de la que somos capital y cuya actividad impulsamos fue el año pasado la segunda Comunidad Autónoma de España tanto por exportación como por importación de bienes, lo cual da idea del dinamismo de un sector exterior que para sus transacciones depende en buena parte del transporte por mar. La alta preparación de los recursos humanos que sostienen la economía de una ciudad que casi dobla la media española de estudiantes universitarios por cada mil jóvenes, y la mayor inversión de todo el país en innovación y desarrollo, con un 26,9% del esfuerzo dedicado a esta materia concentrado en Madrid y su zona metropolitana, completan este círculo virtuoso de la economía madrileña, en el que, al igual que en un cluster, se requiere la concurrencia de muy diversos factores de calidad. Hasta el punto de que, más allá de la importancia que en la economía nacional tienen tanto la ciudad de Madrid como su región, encontramos que en un radio de 300 kilómetros se concentra más del 26% del PIB nacional, el 24% de la población activa, el 33% de la carga transportada en España, el 17% de las exportaciones, el 28% de las importaciones y una gran concentración de operadores logísticos, compañías de transporte y de infraestructuras.
 

Así pues, y aunque Madrid no tenga puerto de mar, su centralidad hace que sea el nodo de los principales ejes ibéricos intermodales, donde confluyen las principales rutas de distribución de la Península, las que parten de los puertos de Valencia, Barcelona, Lisboa, Bilbao, Algeciras y Vigo. A todo ello se une que disponemos de la mejor conexión aérea con Latinoamérica, razón por la que Madrid atrae a los principales operadores de carga. No tiene una importancia menor el hecho de que en nuestra ciudad se encuentren también algunas de las principales infraestructuras logísticas de la región, como el punto de ruptura de carga de Abroñigal, el centro de carga aérea de Barajas, el Centro de Transportes de Madrid y Mercamadrid. El Centro de Transportes de Madrid, en el que colaboran la iniciativa pública y la privada, es decano del sector en la Comunidad madrileña y pionero en España, y está orientado a la pequeña y mediana empresa del transporte.

Con 338.000 metros cuadrados, tiene como característica fundamental su estratégico emplazamiento, por su cercanía al centro de Madrid y a sus principales vías de comunicación, así como la vecindad con Mercamadrid. Superficie esta última que abastece a más de nueve millones de habitantes y es el mayor mercado europeo de alimentación perecedera. Además, el Gobierno de la Ciudad, junto al ejecutivo regional y las empresas más importantes de la logística y el transporte, integran Madrid Plataforma Logística, cluster empresarial que tiene como finalidad atraer tráficos, empresas y nuevas actividades del Sur de Europa, reforzando así nuestra capitalidad en el Continente.
 

Así pues, la importancia que Madrid concede a las sinergias creadas por la actividad de distintas empresas y agentes socioeconómicos, y el propio peso del sector marítimo español en nuestra economía, son la mejor demostración de que no hay mejor lugar que nuestra ciudad para defender sus intereses ni espacio donde vayan a encontrar mayores oportunidades. Enhorabuena por haberlo entendido así, y por propia la actividad que estos premios reconocen hoy. Muchas gracias.
 

Ver reportaje gráfico en:
www.clustermaritimo.es/vernoticia.asp?id=486

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