Según datos de Lloyd’s List Intelligence, a finales de octubre había 280 portacontenedores amarrados que representan el 5,2% de las unidades de la flota de este tipo de buques, si bien su capacidad, que suma 607.280 TEUs, supone solo un 2,7% de la capacidad total. Solo un mes antes, la flota amarrada representaba el 1,8% de la flota mundial, es decir, ha subido casi un punto porcentual en un mes.
Entre los portacontenedores amarrados se incluyen cuatro buques de más de 13.000 TEUs: MAERSK EMDEN, MOL QUINTET, COSCO DEVELOPMENT y MORTEN MAERSK (uno de los portacontenedores Triple E), afectados por la suspensión de líneas y servicios de los grandes operadores entre Asia y Europa. También hay actualmente seis buques inactivos de entre 10.000 y 12.999 TEUs.
Según ha declarado el consejero delegado de Maersk Line, Soren Skuld, a Lloyd’s List, en su caso se debe a la falta de carga suficiente para llenar los buques durante la “Semana de Oro” china.
El aumento de la flota amarrada también es consecuencia de un mercado de fletamento por tiempo a la baja, en el que a los buques más pequeños les resulta cada día más difícil encontrar contratos.
Desde la primavera, los fletes en todos los tamaños de portacontenedores han ido descendiendo y la flota amarrada ha crecido constantemente, sobre todo en los buques de menor capacidad, ya que las citadas cifras de LLoyd’s List Inteligence incluyen 239 unidades amarradas con una capacidad menor de 5.000 TEUs, y, de estas, 139 lo han estado más de 90 días.