Nuevo jarro de agua fría para el cerco gallego. El Consejo Internacional para la Exploración del Mar (CIEM o ICES por sus siglas en inglés) recomendó ayer reducir un 92% las capturas de sardina en aguas ibéricas para el próximo año. Los expertos aconsejan rebajar el esfuerzo pesquero hasta las 1.587 toneladas en 2016, frente a las 19.005 que puede pescar la flota española y portuguesa este ejercicio. Los científicos afirman en su informe que la escasez de la especie en dichas aguas es “histórica” y que sus existencias han caído a mínimos desde hace una década.
Este recurso no está sometido al régimen de Totales Admisibles de Capturas (TAC) de la Unión Europea que se aplica en el Atlántico, por lo que España y Portugal acordaron un plan de gestión que limitó las capturas para la flota española a mil toneladas mensuales, con el objetivo de que Bruselas no impusiese una cuota. Este pacto bilateral entre ambos países supuso que los cerqueros gallegos contasen este año con un tope semanal de pesca de 3.000 kilos por barco, una cantidad que se incrementó recientemente hasta los 6.000 durante el verano- tras un acuerdo entre sector y Administración para aprovechar los buenos precios de primera venta de la especie-.
La Asociación de Armadores de Cerco de Galicia (Acerga) calificó ayer el dictamen de “auténtico desastre” y aseguró que el sector está comprometido con recuperar la biomasa de la especie. “Hacemos todo lo que está en nuestras manos para que la situación del stock mejore. Espero que Bruselas piense muy bien todo lo que nos jugamos antes de decidir si impone o no un TAC para la sardina”, declaró el portavoz de Acerga, Andrés García.
La especie desapareció en los últimos meses del litoral gallego y las subastas de este recurso en las lonjas no fueron abundantes, una situación provocada en gran medida por el viento del nordeste que azotó las costas de la comunidad. La flota achaca además las escasas capturas de sardina a la presencia de otras especies como el jurel o la xarda (caballa), que impiden que el recurso se adentre en Galicia.
García puso en entredicho además los estudios científicos del CIEM, organismo encargado de aconsejar a la Comisión Europea en sus propuestas sobre cuotas pesqueras. “Se ve que la investigación está muy bien hecha, como la del jurel, que afirma que escasea en el Cantábrico y las costas gallegas están repletas”, ironizó el también patrón mayor de Sada. “Se nota que esta gente vive de la pesca pero no de pescar”, concluyó.
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