Medios de salvamento españoles y franceses participaron ayer en el rescate de los nueve marineros del pesquero Gemina -propiedad de un armador de O Grove pero con base en el puerto galo de Bayona-, que sufrió una vía de agua cuando se dirigía a tierra para descargar las capturas de merluza obtenidas tras más cuatro días de faena. Los nueve tripulantes -dos gallegos (coruñeses), un francés y seis portugueses- salieron ilesos tras la intervención del Helimer 401, con base en A Coruña, de un helicóptero francés y un mercante que se encontraba en la zona.
El Centro de Coordinación de Salvamento de Fisterra recibió a las 21.05 horas del martes la alerta del armador del pesquero, que avisaba de que el buque tenía una vía de agua a 160 millas al norte de Estaca de Bares. Unos cinco minutos después era la propia tripulación del Gemina la que solicitaba a Sasemar bombas de achique para intentar controlar la situación.
La emergencia fue coordinada por el centro francés de Cross Etel, al encontrarse el barco en zona de responsabilidad de Francia, que activó un helicóptero y un avión galos y al Helimer 401. Precisamente fue esta última aeronave la que a medianoche del martes facilitó una bomba de achique al pesquero y evacuó a uno de sus tripulantes (un portugués) a A Coruña, mientras que el helicóptero francés rescató a otros cinco marineros, que fueron llevados a Brest (Francia). Los tres restantes permanecieron a bordo intentando controlar la vía de agua con el mercante MSC Japan al costado.
Finalmente, ante la imposibilidad de controlar la situación, los tres tripulantes abandonaron el Gemina y fueron recogidos por el mercante, que continuó su travesía hacia Rotterdam (Holanda).
El pesquero siniestrado tiene veinte metros de eslora y fue construido hace 32 años, según uno de sus armadores, el grovense Carlos Domínguez Caneda, propietario del barco junto a su hermano Marcelino (Lino), conocidos en su localidad natal como Os Casapos. “Llevaban cuatro o cinco días pescando merluza y regresaban a puerto cuando se produjo el accidente”, indicó el armador grovense, visiblemente conmocionado por lo sucedido y con pocas ganas de hablar de ello. “Lo verdaderamente importante es que la gente está a salvo y todo se limita a daños materiales”, indicó Carlos Domínguez, que calificó de “cuantiosas” las pérdidas.
El propietario del Gemina apuntó que se desconoce qué provocó la vía de agua, pero incidió en que la tripulación era muy experimentada y que el barco estaba en regla, “tras haberse sometido a todo tipo de revisiones e inspecciones”.
Domínguez se afanaba ayer en cerrar todos los trámites para repatriar a los marineros y explicó que algunos de ellos ya regresaron ayer a casa, mientras que los que iban en el mercante MSC Japan no lo harán hasta el viernes o el sábado.
Fuentes de la asociación coruñesa PescaGalicia, a la que pertenece el pesquero, explicaron a este diario que el Gemina operaba habitualmente en A Coruña -donde vendía sus capturas, aunque a veces también iba a Pasajes (País Vasco)- y que en su puerto base (Bayona) realizaba todas las gestiones administrativas, revisiones y reparaciones. “Estaba anotado para vender, por lo que esta era su última marea. No sabemos qué es lo que ocurrió, pero por suerte no hay que lamentar víctimas”, indicó un representante de PescaGalicia.
Los nueve tripulantes -entre ellos los dos coruñeses, el patrón y uno de los dos mecánicos de la embarcación- salieron ilesos y no precisaron de atención sanitaria.
Al cierre de esta edición, según fuentes de Salvamento Marítimo, el Gemina permanecía “semihundido, con la proa sumergida” frente a la costa francesa. Para evitar accidentes, las autoridades galas y españolas emitieron radioavisos de alerta para las embarcaciones que se encontraban en las proximidades.
http://www.laopinioncoruna.es/mar/2015/05/28/rescatados-ilesos-nueve-marineros-pesquero/961032.html