La energía eólica marina, también conocida como offshore, se ha convertido en una de las tecnologías renovables con mayor proyección de desarrollo, especialmente en algunos países de Europa Occidental como Alemania, Francia o Reino Unido.
Pretende ser alternativa en España dado la profundidad del litoral marítimo
NEGOCIO, 12 Abr. (Madrid).- En el caso de España, el desarrollo de esta tecnología se ha frenado porque entre otros aspectos "el potencial existente de áreas de desarrollo con la tecnología actual (estructuras directamente ancladas al fondo marino) es limitada debido a la gran profundidad de nuestras costas", asegura Álvaro Martínez Palacios, director de Operaciones Offshore de Iberdrola en una entrevista concedida a NEGOCIO.
Para la compañía líder en energías renovables, el futuro de esta tecnología en España pasa por investigar en tecnología flotante, es decir, que el molino no esté sujeto al fondo marino sino que flote en una estructura en el mar. "En el futuro puede que surjan oportunidades para tecnologías flotantes pero estas soluciones no se encuentran todavía en fase comercial. Iberdrola está trabajando en proyectos de investigación de este tipo pero pensamos que estos proyectos no serán comerciales a corto o medio plazo", señala Martínez Palacios.
Ese será el futuro de la eólica marina pero Iberdrola lleva más de ocho años trabajando en offshore y tiene proyectos por casi 11.000 megavatios (MW) de potencia (7.200 MW en el proyecto de East Anglia Array en Reino Unido). Fuentes del mercado energético cuentan a este periódico que en la actualidad el precio de un megavatio de eólica offshore tiene una inversión detrás de tres millones de euros, por lo que en el caso de Iberdrola, durante los últimos ejercicios y en los próximos años invertirá 33.000 millones de euros, en desarrollar sólo sus proyectos de eólica marina en Reino Unido, Alemania y ahora también en Francia.
Nuevos proyectos
"Nuestro trabajo en los próximos años se va a centrar en continuar desarrollando nuestra importante cartera de proyectos sin descartar nuevas oportunidades que puedan surgir", afirma el director de Operaciones Offshore de Iberdrola, que añadió que "actualmente nuestras prioridades se sitúan en Reino Unido, Alemania y Francia, pero estamos activos y explorando oportunidades en otros mercados que podrían desarrollarse en el futuro, siempre que reúnan las condiciones de estabilidad, sostenibilidad y rentabilidad razonable".
La semana pasada Francia otorgó a Iberdrola la licencia para desarrollar un proyecto de eólica marina de 500 MW y que supone la entrada de la compañía en este mercado. "El gobierno francés ha realizado una apuesta muy importante para el desarrollo de la energía eólica marina convirtiendo las costas francesas en uno de los principales mercados offshore en los próximos años y por lo tanto uno de los países donde queremos jugar un papel importante", señala Martínez Palacios.
"En el concurso francés hemos tenido que competir con otras grandes empresas y para nosotros es una gran satisfacción que el gobierno francés haya considerado la propuesta de Iberdrola entre las mejores. Creo que se ha valorado especialmente nuestro proyecto industrial, la solidez de nuestro consorcio, nuestra credibilidad, reputación y compromiso a largo plazo", apunta el directivo, que destaca el hecho de tener como socio a la francesa Areva que es "uno de los líderes mundiales en suministro de turbinas offshore y creemos que nuestro acuerdo con ellos ha sido clave para la elección de nuestro proyecto en este concurso. Pensamos que Areva continuará siendo uno de los principales suministradores en el mercado eólico internacional que consideraremos en nuestros proyectos", explica.
Eso sí, Martínez Palacios no descarta que en un futuro, su proveedor principal de eólica terrestre, la española Gamesa, se sume a este negocio. "Gamesa tiene planes muy sólidos y está realizando un gran esfuerzo para desarrollar aerogeneradores offshore lo que incrementará significativamente la competencia en el mercado y contribuirá al desarrollo tecnológico beneficiando a esta industria. Por supuesto que será una opción importante a considerar para nuestros proyectos", asegura el directivo de Iberdrola.