El director general de los astilleros Astican y Astander (en Santander) aboga por estimular la entrada de plataformas petrolíferas en La Luz, por los enormes beneficios económicos que genera. José Romero asegura que el sector, al igual que el turismo, está recuperándose

Más de 400 barcos pasaron durante 2010 por Astican y Astander
 
LA PROVINCIA, 15 Feb. (Las Palmas G.C.).-
 
– ¿Qué balance hace del año?
 
– A pesar de que la actividad en el primer semestre fue floja, ya que se notó la crisis, el mercado se animó en el segundo. Y los resultados han sido aceptables. Astican reparó unos 200 barcos, y varadas unas 140. Astander unos 60.
 
– ¿Se afianzará la recuperación este año?
 
– Este año facturaremos unos 50 millones de euros, cuando el año pasado fueron unos 40 y algo. Vamos a tener dos plataformas contratadas, y eso influye mucho en los resultados. Y se mantendrá más o menos la misma actividad, unos 200 reparados y 140 varadas.
 
– ¿Qué modelo de negocio mantienen en su Plan estratégico a medio plazo?
 
– Yo llevo aquí casi desde que se creó, y Astican es un astillero que se ha ido adaptando al mercado con una enorme facilidad. Eso lo dan las siglas. Pasamos de reparar muchos pesqueros, luego transformaciones de las factorías rusas, seguimos con los buques frigoríficos y ahora quimiqueros, barcos de apoyo a plataformas y plataformas petrolíferas, que también estamos reparando desde hace unos años. Nos adaptamos al mercado que es estratégico en cada momento, y que puede tener un peso específico grande.
 
– ¿Qué han supuesto las plataformas petrolíferas?
 
– Ahora mismo estamos tratando de entrar lo más posible en el mercado de las plataformas. Es un mercado muy exigente, en el que tuve mis dudas al principio, porque hay muchas exigencias sobre la organización, procedimiento, calidad, seguridad… Son los máximos estándares que se puede imaginar. A pesar de todo, estamos homologados por las principales compañías, y hacemos hincapié en las plataformas que operan en la costa occidental de África, que es nuestro mercado geográfico. Y estamos teniendo bastante éxito. Para ello, la Autoridad Portuaria nos está arropando bastante. Hemos hecho un gran esfuerzo y estamos recogiendo los frutos.
 
– El Puerto inició un proyecto para acoger plataformas asentadas en el lecho marino. ¿Es una opción viable?
 
– La Autoridad Portuaria está intentando traer ese tipo de plataforma, que trabaja en fondos no muy profundos. Nosotros las que hemos reparado eran semisumergibles. Y tenemos contratada una para marzo.
 
– ¿Es el principal objetivo de la empresa ahora?
 
– No. Somos reparadores navales y, dentro de esta industria, es una parte del mercado.
 
– ¿La Autoridad Portuaria camina en la senda adecuada?
 
– Creo que se está haciendo como debe hacerse. También creo que a los armadores debe transmitirse su apoyo a este negocio, que es interesante, porque son hoteles, restaurantes y muchos servicios, y de alto poder adquisitivo. Es un gran negocio para el Puerto y la ciudad.
 
– ¿Descartan la construcción de barcos?
 
– Sí. Nuestro mercado es reparación y transformación. En Astander, no. Acabamos de construir un barco.
 
– Ustedes han descartado la compra de los astilleros de Sevilla, que estuvieron valorando en verano. ¿Existe ahora algún plan de compra en cartera?
 
– No. Ni siquiera Sevilla. De momento estamos bien así.
 
– ¿Les beneficiará la ampliación del Canal de Panamá y el aumento del tráfico?
 
– Si la tendencia de los barcos es a crecer su anchura, nos afecta negativamente, porque tenemos una limitación de manga a 30 metros. No podemos varar cruceros, ni estamos en ese mercado, salvo cuando es a flote.
 
– ¿Qué objetivos tiene Pymar, de la que es presidente?
 
– La asociación está formada por astilleros de reparaciones y nuevas construcciones. Se creó para pagar las subvenciones, y tiene una herramienta que es el fondo patrimonial de garantía, para dar garantías al armador. Sin Pymar no se contratarían muchos barcos en España.
 
– ¿Las perspectivas del sector son buenas?
 
– Los astilleros de nuevas construcciones lo están pasando mal, porque los pedidos han disminuido, aunque este año se contrata más. Y sobre todo de petróleo. Los de reparaciones estamos mejor. Nuestro mercado es internacional. El 80% de nuestra venta es para el extranjero y nos beneficiamos, aunque España vaya rezagada. Es igual que el turismo.
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