Un consorcio de empresas de México, España, Alemania, Holanda y Gran Bretaña compite con dos consorcios de Estados Unidos, Europa y Asia, para hacerse con un contrato por valor de 3.350 millones de dólares para la construcción del tercer juego de esclusas del Canal de Panamá, uno de los principales megaproyectos de América Latina y el Caribe, informa El Universal de México.

La compañía privada mexicana Ingenieros Civiles Asociados (ICA), que construyó una de las carreteras de la capital panameña y explota el servicio de peaje, se alió a firmas europeas para disputar una de las obras estratégicas de la ampliación del canal, que empezó en 2007 con un costo total de 5.250 millones de dólares.

ICA es parte del consorcio CANAL, junto a ACS Servicios, Comunicaciones y Energía S.L/Líder, Acciona Infraestructuras y Fomento Construcciones y Contratas, de España, y Hochtief Contruction AG, de Alemania. Al grupo también pertenecen los diseñadores Sener Ingeniería y Sistemas, de España, Hochtief Consult, de Alemania, Haskoning Nederland BV, de Holanda, y Mott Macdonald Limited, de Gran Bretaña, y el fabricante de compuertas ACS Servicios, Comunicaciones y Energía S.L. Varias de las empresas citadas están asociadas al Clúster Marítimo Español.

Los otros dos consorcios que compiten por este contratos son Bechtel, Taisei, Mitsubishi Corporation, formado por Taisei Corporation y Mitsubishi Corporation, de Japón, y Bechtel International Incorporation/Líder, de Estados Unidos, también diseñador, y el fabricante de compuertas Wuchang Shipyard, de China. El otro consorcio en pugna es el Grupo Unidos por el Canal, con Sacyr Vallehermoso S.A./Líder, de España, Jan de Nul n.v., de Bélgica, Constructora Urbana S.A., de Panamá, e Impregilo S.p.A, de Italia, con los diseñadores IVGroep, de Holanda, Montgomery Watson Harza/Líder y Tetra Tech, de Estados Unidos, y el fabricante de compuertas Heerema Fabrication Group, de Holanda.

Los consorcios han presentado sus ofertas técnicas y económicas a la Autoridad del Canal de Panamá (ACP), quien las ha depositado en el Banco Nacional de Panamá, para garantizar la transparencia del proceso. La parte técnica ya comenzó a ser analizada, mientras que la económica será abierta en una sesión pública probablemente a mediados de junio próximo. Con este nuevo juego de esclusas sobre los litorales panameños en el Mar Caribe y el Océano Pacífico será posible el paso de buques de mayor tamaño.